(Información extraída de "Wikipedia")
Un mundo feliz (Brave New World en inglés, literalmente ‘[un] valiente nuevo mundo’) es la novela más famosa del autor británico Aldous Huxley, publicada por vez primera en 1932
La novela desarrolla su trama en un futuro 632 d.F. (año 2488 en el calendario real; "d.F."= "despues de Ford"), donde las personas son incubadas y predestinadas desde que nacen para pertenecer a diferentes castas: Alfas, Betas, Gammas, Deltas y Epsilones. Cada casta está destinada a realizar ciertas tareas: los Alfas son la casta superior, por lo que realizan los trabajos que requieran de más inteligencia, mientras que los Epsilones llevan a cabo los trabajos más duros y arduos. A pesar de ello, todo el mundo es feliz, porque, desde su misma concepción, los embriones han sido acondicionados y, desde que nacen, a los pequeños se les realiza hipnopedia mientras duermen para convencerlos de las ventajas de pertenecer a ese mundo y a sus castas; porque todas sus necesidades están satisfechas y porque en caso de sentirse mal tienen a su disposición el soma, una droga que es entregada por el Estado.
Un mundo feliz presenta a Bernard Marx, un Alfa rechazado socialmente por no tomar soma y ser más bajo que los demás Alfas por un supuesto fallo durante su gestación y a Lenina Crowne, que al visitar una reserva de indios norteamericanos, se traen de allí a uno de los denominados "salvajes".
Todo el planeta está unido como un estado mundial, bajo un gobierno pacífico que ha eliminado la guerra, la pobreza, el crimen y la infelicidad al crear una sociedad de alta tecnología homogénea para todo el mundo, adquiriendo un estatus semi-religioso basado en los principios filosóficos de Henry Ford. El Fordismo forma la piedra angular de la nueva sociedad y formando la columna vertebral de la filosofía. La sociedad está estrictamente dividida en cinco clases, y todos los miembros de la sociedad están entrenados para ser buenos consumidores con el fin de fortalecer la economía. El uso de drogas de placer se ha convertido en el pilar de la sociedad, y los ciudadanos toman regularmente tabletas de soma, una droga que hace que los usuarios sientan una felicidad absurda. Todos los niños se crean por embriones cultivados en laboratorios, y el destino de cada individuo es determinado mucho antes de su nacimiento. Controlados estrictamente, los niños practican juegos sexuales entre ellos desde su más tierna infancia (un concepto del propio Freud: la sexualización infantil) con el total consentimiento de los adultos, sin que éstos intervengan en dichos juegos, a excepción de reprender al que no quiera participar en ellos.
Lenina, una empleada de laboratorio en el criadero central de Londres, es un ser conformista, la personificación de la nueva sociedad. Es atractiva, elegante, promiscua y su visión de la vida es producto del adiestramiento. Bernard es la antítesis de Lenina. A pesar de ser miembro de la casta superior de los Alfas, Bernard no es feliz con su vida y le desagrada la sociedad. Se siente profundamente inseguro de sí mismo y, aunque no lo sabe, es objeto de burla por parte de los demás debido a su rechazo hacia las normas sociales.
Lenina y Bernard hacen un viaje de ocio a Malpais, una reserva donde hay una sociedad “antigua” que no posee las características de la sociedad Fordiana. Allí se encuentra Linda, una mujer miembro de la sociedad Fordiana pero que por un accidente se queda en Malpais, y concibe a un niño, John. Mientras Lenina se escandaliza y horroriza por la sociedad escuálida y vivípara de Malpais, Bernard se encuentra fascinado por ésta y por John, quien tiene acceso a las obras de William Shakespeare, autor desconocido en el Estado Mundial. John, al igual que Bernard es un marginado dentro de su propia sociedad y está deseoso de ver el mundo fuera de Malpais. Bernard acepta llevar a Linda y John de regreso a Londres, donde manipula la fascinación de la sociedad con ellos, para elevar su propia posición social... pero los resultados no son los esperados.
Un clásico de la Ciencia Ficción, un mundo desconcertante donde la palabra "madre" es obscena (pues lo natural es nacer de tubos de ensayo), donde la droga es suministrada por el Gobierno, donde "todo el mundo pertenece a todo el mundo"... y todo por la felicidad individual y por tanto del bien social.