miércoles, 18 de abril de 2012

El viento comenzó a mecer la hierba (Emily Dickinson)



"Emily Dickinson fue una mujer inteligente, rebelde y culta que, en su encierro voluntario en la habitación de su casa en Amherst, construyó una de las obras más sólidas de la literatura universal.
Como señala Juan Marqués en la presentación, sus poemas «además de ser escritos, en principio, exclusivamente para la inmensa minoría de sí misma, fueron, a un tiempo, complicadísimos y simples, alegres y tristes, transparentes y enigmáticos. Son poemas que acompañan y ayudan a vivir a quien los lee, que enseñan a observar mejor, que obligan a ser más compasivo».

Aunque su obra es muy extensa, hemos preferido editar un libro pequeño, íntimo, dickinsoniano, para lo que ha sido fundamental la visión poética de las ilustraciones de Kike de la Rubia"

Si a los mejores poemas de Emily Dickinson le añadimos las bellísimas ilustraciones del genial Kike de la Rubia y todo ello lo aderezamos con los poemas en su inglés original, nos encontramos ante un libro de obligada lectura para cualquier amante de la poesía, de la belleza y de la vida.

Mi enhorabuena a Nordica Editorial y a mi amigo Kike por esta pequeña joya que nos han brindado.

viernes, 13 de abril de 2012

Claroscuro (Nella Larsen)



"Irene Redfield se reencuentra por casualidad con una amiga de la infancia, Clare Kendry, quien comparte con ella el hecho de que, a pesar de ser negra, su piel es lo suficientemente clara para que pueda pasar por blanca. Irene ha permanecido en la comunidad negra y está casada con un médico afroamericano. Clare, sin embargo, oculta su identidad racial y está casada con un blanco que goza de una desahogada posición económica y desprecia a la gente de color. El casual encuentro hace que, a pesar de la reticencia inicial de Irene, retomen su amistad, amistad que le permitirá a Clare cumplir su deseo de reencontrarse con los de su raza."

El título original de la novela, Passing, hace referencia a pasar por una identidad racial a la que no se pertenece. En efecto, aunque ambas mujeres pueden pasar por blancas por el color de su piel, sólo Clare ha renunciado a su raza y vive con un magnate que, para complicar aún más las cosas, odia a los negros. Aun así, Clare no ha podido dejar atrás del todo a sus raíces y desea seguir teniendo contacto con "su gente", para lo cual se ayuda de Irene.
Pero esto no es más que el origen de los problemas: miedo porque el marido de Clare la descubra en estos círculos, miedo porque Clare se encapriche del marido de Irene o él de ella, miedo porque alguien descubra la verdadera identidad racial de Clare en una de sus múltiples escapadas sociales...

Deliciosa novela con unos personajes perfectamente definidos y un desgarrador final.
Recomendada especialmente para para todas las razas.

martes, 10 de abril de 2012

Xingú (Edith Wharton)



"Las señoras Ballinger, Plinth, Leveret y Roby y las señoritas Van Vluyck y Glyde son las integrantes del Club del Almuerzo, en cuyas reuniones se dedican a debatir sobre libros y los más variados temas culturales. Un día, Osric Dane, una famosa escritora, visita la ciudad, y el Club le cursa una invitación para que asista a una de sus reuniones. Las integrantes del club ven el encuentro con la escritora como una excelente oportunidad para lucir sus mejores galas intelectuales. Sin embargo, la reunión se desarrollará de manera muy diferente a como habían previsto."

Con casi una quincena de títulos a sus espaldas, Contraseña Editorial sigue en su línea de siempre: obras inéditas de autores reconocidos, traducciones impecables y ediciones cuidadas hasta el más mínimo detalle. Y si bien es cierto que siempre han tenido muy claro qué dirección tomar, es innegable que Contraseña se siente cada vez más cómoda en lo suyo, y eso se nota con cada joyita que publican y en el ritmo de publicación (afortunadamente para seguidores como yo)

En esta ocasión repiten autor por primera vez, y el evento merece sobradamente la pena: Edith Wharton, con la que ya nos deleitamos en "Las Hermanas Bunner" hace un par de años.

En esta deliciosa novela seremos testigos de cómo el "selecto" Club del Almuerzo con sus pedantes e insoportables miembr@s (Bibiana Aído Dixit) esperan la visita de la celebérrima escritora Osric Dane y están deseando lucirse ante ella. Pero Osric es más altiva que ellas, fría, distante... hasta que aparece el tema de moda: Xingú. Todos han oído hablar del ello, lo han estudiado, lo practican asiduamente... Un desenlace inesperado, con cierto humor absurdo, pondrá las cosas en su sitio.

Destacar las preciosas ilustraciones de Sara Morante y el detalle de la 1ª y la última página: el estampado de una de las integrantes del club.

sábado, 7 de abril de 2012

El Papel Pintado Amarillo (Charlotte Perkins Gilman)



"En 1885, un año después de haberse casado con Charles Walter Stetson, Charlotte Perkins Gilman dio a luz a su hija, Katharine, y al poco tiempo entró en una profunda depresión.
El doctor Silas Weir Mitchell, un reputado neurólogo a quien había acudido en busca de ayuda, le diagnosticó agotamiento de los nervios y le prescribió una cura de descanso, un controvertido tratamiento en el que era pionero. «Vive una vida tan hogareña como te sea posible, realiza no más de dos horas de actividad intelectual al día y no toques nunca más una pluma, un pincel o un lapicero»: estas fueron las instrucciones que le dio el médico a la autora.
Durante unos meses siguió estos consejos, pero su depresión se agravó, y, según sus propias palabras, se acercó tanto a la frontera de la profunda ruina mental que llegó a vislumbrar el otro lado.
Solo haciendo caso omiso de los consejos del médico y volviendo al trabajo logró recuperarse de su depresión.
Esta experiencia la marcó hasta tal punto que en 1890 escribió El papel pintado amarillo, un estremecedor relato que constituye una demoledora crítica al tratamiento prescrito por el doctor Mitchell"

Escrito durante un brote severo de depresión postparto, esta novela corta, o cuento, no dejará a nadie indiferente.
A finales del S. XIX, la psiquiatría y la psicopatología no contaban con los métodos actuales, y sus paradigmas eran diametralmente opuestos a los de ahora. El sentido común nos dice que a alguien deprimido debemos darle entretenimiento en forma de aficciones o compañía; por contra, por aquel entonces, a nuestra autora se le obligó a guardar total reposo, a evitar todo tipo de actividad y a llevar una vida contemplativa, lo cual agravó su depresión endógena (o exógena si lo atribuimos a su reciente maternidad) y le llevó a escribir esta bella-triste novelita. En este caso, algo tan banal como el papel pintado de su habitación, será el precipitante de la ruina mental de la enferma.

Desconcertantes las palabras de la enferma: "mi marido (el doctor) no sabe cuánto sufro, sólo que no hay motivo para que sufra"

En una cuidada y bilingüe edición, Editorial Contraseña nos brinda una descorazonadora y bella obra. Un 10.